Matongé y Saint-Boniface: barrios cosmopolitas y bares a la última

11 marzo 2022

¿Necesitas evadirte? Matongé y Saint-Boniface satisfarán tus ansias de viajar. Ambos forman un conjunto cosmopolita y animado que frecuentan principalmente los lugareños.

Matongé es el barrio africano de Bruselas. Su nombre proviene de un barrio de Kinshasa, en el Congo. La gente suele acercarse a Matongé para sumergirse en un ambiente exótico, descubrir los típicos peinados africanos y pasar un buen rato. Saint-Boniface es conocido por sus numerosos bares de moda, sus restaurantes internacionales y sus bares musicales. 

Ruta por su arquitectura

La arquitectura del barrio de Saint-Boniface es un conglomerado de tendencias europeas. Comienza el paseo a los pies de la iglesia gótica de Saint-Boniface. Un poco más adelante, en los números 15, 17, 19, 20 y 22 de la calle Saint-Boniface, te encontrarás con las fachadas Art Nouveau de Ernest Blerot, tan parecidas y tan diferentes a la vez. Sigue hasta la plaza Fernand Coq, donde se alza la Maison Communale d'Ixelles, de estilo neoclásico. Este edificio cuenta con un impresionante vestíbulo y un salón de bodas. ¿Te apetece dar una vuelta en bici? Pásate por Pro Velo para alquilar una bicicleta y pedalear por las calles de la capital.

Ambiente africano

Matongé es un auténtico microcosmos donde se concentran multitud de actividades típicamente africanas: te puedes encontrar el mejor Saka saka (plato centroafricano a base de hojas de mandioca), muchas peluquerías especializadas y tiendas de ultramarinos repletas de frutas y verduras tropicales. Algunas establecimientos de visita obligada son: L'horloge du Sud por sus filetes de cocodrilo y sus actividades culturales y musicales; Kuumba, donde podrás visitar exposiciones, participar en talleres de cocina africana, asistir a conciertos o simplemente tomar una copa; y para terminar tu inmersión cultural, el Soleil d'Afrique, donde probarás el mejor pollo moambe de la capital.

Hora del aperitivo

Saint-Boniface es el lugar perfecto para ir a tomar una copa. En cuanto se hace de día, los bruselenses se lanzan a coger sitio en alguna de las coloridas sillas del bar Athénée, donde la cerveza rubia fluye sin cesar; o en Contrebande y su encantadora terraza interior, donde podrás disfrutar de cervezas locales y tapas ecológicas. Si te gusta más el vino ecológico, tienes que probar la vinoteca Titulus. Sirve más de 350 variedades de vino, todas ellas acompañadas de queso, embutidos o ceviche casero.

Tour gastronómico del mundo

Matongé y Saint-Boniface te ofrecen un viaje culinario a las cuatro esquinas del mundo. ¿Te apetece cambiar de aires? En Saint-Boniface, la Osteria Bolognese es un pequeño restaurante italiano que está teniendo mucho éxito. Un chef de Bolonia prepara aquí unos platos deliciosos. Un consejo: reserva mesa con 3 semanas de antelación para asegurarte un sitio. ¿Prefieres comer sobre la marcha? Yamato es un auténtico bar de ramen frecuentado por muchos japoneses. También en el barrio, Kitchen 151 ofrece un sabroso menú de origen israelí. Y si eres más goloso, Fika es el lugar al que acudir para tomar un café y degustar su repostería casera; ¡no olvides tomar asiento en el idílico jardín de la parte trasera del local!

Vida nocturna

Un barrio lleno de vida es sinónimo de fiesta. En primer lugar, déjate llevar por el blues y el jazz en el Sounds Jazz Club o descubre ritmos de todo el mundo en Muziekpublique. Después, escucha a los artistas de stand-up en el Pacific. Este antiguo bistró se ha convertido en el nuevo bar de moda del barrio, y su sótano ha sido decorado por el famoso artista callejero bruselense Jaune. También puedes acercarte a Chez ta mère, bar que es conocido por sus fiestas bien cargadas de alcohol en un alocado ambiente retro.

Cómo llegar:

  • Metro lines 2, 6: Porte de Namur/Naamsepoort
  • Bus 71, 54